Una Historia jamás contada

The Hunters (Los Cazadores) es una historia que nació en este extraño cerebro mío, en mayo de 2.007. Por motivos personales, no pude llegar a plasmarla en fotos y vídeos, incluyendo banda sonora propia y todo quedó en el papel y en mi cabeza. Es muy posible que, de haber salido a la luz, hubiese tardado meses y meses en realizarla. Tal vez, aún andaría por casi el final de la misma, quién sabe. Sólo sé que ya es muy tarde para hacerla, por no decir imposible. Sería absurdo, en puertas de la llegada inminente de los sims 3; como se suele decir, renovarse o morir. Aunque os confieso que, cuando tenga que desinstalar de mi ordenador el juego y todos mis contenidos personalizados, estoy segura que una parte de mi misma se irá con todo ello. Y sin ánimo de exagerar o parecer algo dramática, un buen trozito de mi corazón se quedará para siempre con todos mis queridos nenes, y sus respectivas chicas. Han sido 4 años de compartir con todos ellos muchas penas, alegrías, cabreos y otros muchos sentimientos que desahogaba al iniciar el juego o el taller del cuerpo. Y eso, además de ser mucho tiempo en la vida de una persona, es algo que sólo uno mismo sabe entender.
De cualquier modo, este blog no es para prodigar discursos sobre los Sims y mis sentimientos hacia ellos; este blog me va a hacer un buen uso. Voy a intentar, todo sea dicho, hacer una síntesis de lo que es mi historia, The Hunters, en orden de que ciertos lectores que ahora están siguiendo Los Epílogos, basados en la vida futura de dos personajes de la historia, tengan un poco más claro algunos aspectos de esos epílogos.
 Así mismo, procuraré también, no excederme ni rayarme demasiado. Nada cansa más que un texto aburrido; lo sé, de verdad y no es mi intención que eso suceda.
Por tanto, sin más dilación, os dejo con este resumen, que no la historia, por supuesto: me llevaría semanas poder escribir aquí todo lo que imaginé y conseguí reflejar sobre el papel.
Lo que sí quiero destacar, especialmente para los lectores de los Epílogos, y esto es de suma importancia, es que estos, están directamente relacionados con esta historia -la llamaremos Historia Principal, para no liarnos- y que todo lo que ocurre en esos Epílogos, está basado en la historia y en sus consecuencias. Los personajes que allí aparecen, son los mismos de la historia principal y lo que les ocurre en ella, ha ocurrido de verdad: es su pasado, ni más, ni menos. Quiero decir con todo este galimatías, que la Historia Principal es el pasado y los Epílogos, el futuro de algunos de sus personajes, y que los Epílogos beben directamente de ella.
Y ahora sí que me callo de una vez.

2.011

Todo comienza en unos años futuros, tampoco muy lejanos y la acción se desarrolla en un lugar imaginario, llamado Laine. Es algo así como un estado, formado por varias zonas, comunicadas entre sí por trenes y carreteras, pero cada una, poco a poco va a tener sus propias reglas; algunas, más salvajes que otras, según los seres que allí habiten las vayan transformando a placer. Aproximadamente, se tarda una hora entre zona y zona. Se forman las siguientes zonas: el centro urbano -justo en el medio, como debe ser todo centro urbano- donde vivía la gente de clase más alta, con pasta y poder. En ese centro, estaba el barrio antiguo, formado por edificios viejos pero restaurados, con un cierto aire gótico y retro. En el centro, estaban los locales más de moda y con el mejor ambiente de todo Laine.
Luego estaba la zona de servicos sociales u Organismos, a la derecha: oriente. En ella, la zona social, se localizaban edificios como hospitales, comisarias, juzgados, centros de investigación... y casas de lujo, con jardines y todas esas historias. Por regla general, allí vivían los trabajadores de esos edificios.
A la izquierda, occidente: la zona industrial. Uf, menuda zona. Allí viven los trabajadores de las fábricas, cooperativas y de los temibles Muelles, que allá se ubican. Es una zona dura, de gente muy curtida y quemada. Luego explicaré más, cuando desarrolle la historia.
Debajo del centro urbano, nacen los suburbios, hacia el sur. Digo nacen, porque en un principio, ni siquiera existían. Y eso también os lo contaré después; esto es una mera descripción geográfica.
Al sureste, la zona costera. Esto es, la playa, vamos, habitada por surfistas, vendedores, y gente sin demasiadas ganas de trabajar. Viven del turismo.
Al oeste, estaban Los Llanos de los Caballos. Allí vivían rancheros, vaqueros, en plan Far West y tenían sus propios negocios. Poco a poco, empieza a desaparecer y a fundirse con una nueva zona, creada especificamente para los más jóvenes; el gueto universitario.
Y ya hacia el norte, en la zona más elevada de Laine, están los bosques negros y, en su cumbre, las montañas afiladas. (Black forests y Sharp mountains; lo concebí en inglés). Esta zona estaba muy despoblada. En un pasado muy lejano, estaba habitada por licántropos pero, con el paso del tiempo, esa raza dejó de existir, totalmente aniquilada por los vampiros. En el momento de la historia, comienzan a mudarse allí algunos personajes, logrando sobrevivir y alejarse de los vampiros. Pero en las montañas, para desgracia de un personaje en concreto, vive oculto el jefe de todos los vampiros: es el apodado Crimson Tide, marea roja, pues por donde pasa, va dejando un rastro de sangre a su paso, arrastrando todo lo que encuentra, como una marea sangrienta.
Y esto es, aproximadamente, la situación geográfica de la historia.
Pero ahora, centrémonos en lo que de verdad estáis deseando: los personajes y sus fotos, jeje, o, lo que es lo mismo, el meollo de la cuestión.
Durante largo tiempo, en la zona social existía un centro de investigación llamado CIRE (Centro de Investigación de Razas y Especies). Este centro fue el culpable de que, años atrás, los humanos realizaran todo tipo de experimentos genéticos, lo cual les hace crear nuevas razas. Así nacieron vampiros, licántropos y Cexhus.
Los Cexhus fueron los antiguos Servos, con un exoesqueleto humanoide. Al principio eran muy difíciles de distinguir, ya que apenas se diferenciaban de los humanos, pero su tejido externo requería ciertos cuidados. Poco a poco, fueron deteriorándose y nadie quería hacerse cargo de ellos, además de resultar carísimos, por lo que fueron llevados a la zona industrial como obreros, realizando las tareas más duras y arriesgadas, hasta su total desaparición.
Los licántropos, duraron poco. Era una raza fuerte y agresiva, pero acabaron dominados por los vampiros y la gran mayoría, murió a manos de aquellos. Los licántropos fueron llevados a la zona de los bosques, para estudiarlos en total libertad, sin reparar apenas en que, a la luz del día, no dejaban de ser casi personas como todas las demás. En un principio, eso les salvó, ya que los vampiros, sólo vivían o, mejor dicho, malvivían, de noche. Pero la capacidad de reproducción vampírica era muy rápida y bastante superior a la de los licántropos, así que, al cabo de un tiempo, fueron exterminados.
¿Qué nos queda entonces? Una noche, el jefe del laboratorio de genética del CIRE, Pierre Soissure, logró crear un ser muy superior a todos los demás: nació así, Crimson Tide. Su piel era extremadamente blanca, sus ojos de un azul extraño, casi transparente bordeado de amarillo y casi no tenía vello alguno, salvo las cejas y el cabello que, curiosamente, le nacieron grises. Su cuerpo era perfecto, al igual que sus facciones. Pero Crimson destacaba, rpimordialmente, por estar dotado de  una notable crueldad ladina, un corazón gélido y una increíble maldad refinada que no conocía límites: Crimson era el mal en sí mismo. Se encargó personalmente, de aniquilar uno a uno, a todo el personal del laboratorio nada más abrir los ojos. Sólo una cientifica en prácticas, logró sobrevivir. Se llamaba Mary Deschaint. Antes de huir, pudo salvar algunos documentos sobre todos aquellos experimentos y es su carrera hacia la vida, los escondió en la vieja iglesia de las Dos Vírgenes, oculta en la zona de las bosques. Lo que ocurrió después con ella, nunca quedó del todo claro. Sólo se sabe que Crimson la siguió y, al llegar a las montañas, decidió que aquel era un excelente sitio para sobrevivir. Con el tiempo, poco a poco comenzó la reproducción. Y las mezclas entre razas. No pasó mucho tiempo para poder ver vampiros con aspecto de licántropo o, licántropos con apariencia vampírica. Finalmente, la raza de los vampiros fue la única que perduró, junto con la de los humanos. Pero Crimson deseaba que su raza fuera la única que pudiera poblar Laine, así que, encabezó una encarnizada lucha contra los humanos, proclamándose jefe y líder absoluto de su propia especie y arrasando con todo aquello que se le pusiera por delante. Y, así, es como empieza todo y así es cómo nace esta Historia.
Tengo que añadir algo importante. Crimson no tiene edad o, si la tiene, es casi infinita. Quiero decir que Crimson nace mucho antes de la aparición de mis personajes protagonistas. De hecho, es muy necesario que sepáis esto: Crimson provoca una gran guerra, para acabar con los humanos. Su intención es exterminar la raza, así que no hace distinción alguna con respecto a la edad. Los adultos se dedican a la lucha, pero también, procuran poner su raza a salvo mediante la inteligencia, que para eso está. Los ancianos, niños y adolescentes, incluídos ciertos jóvenes, son enviados muy lejos de Laine para no ser asesinados. Se produce entonces un gran éxodo y sólo quedarán en Laine, aquellos que son capaces de luchar y defenderse por sí mismos; por un lado, evitarán salvar a muchos de los suyos y, por otro, se evitarán también tener que preocuparse por ellos o defenderlos, lo cual, les haría más débiles. Por desgracia, aquella terrible guerra acaba en favor de los vampiros, aunque muchos humanos logran sobrevivir, pero quedan bajo el poder de los vampiros. Laine entonces comienza su declive: desaparecen las escuelas, los parques, todo aquello que requiera luz diurna y todo aquello en lo que los humanos trabajaban y lo hacían funcionar. El motor de Laine se oxida y poco a poco, cae en la desgracia. Los vampiros -Crimson- promulgan ciertas leyes para su beneficio, como aquella que dictaba que se prohibía a los humanos tener hijos. Todos los niños que naciesen serían muertos bajo sus propias manos, evitando así la reproducción. Así que, prácticamente, las relaciones sexuales eran casi inexistentes o, al menos, sin protección: ¡quién iba a arriesgarse a ver morir a su propio hijo, por pasar un buen rato! En muchas ocasiones, no son leyes, sino ritos propios que ellos prodigaban a placer; todo adolescente conseguido, es utilizado para deleite de los vampiros, sea de la índole que fuere pero, primordialmente, la sexual. Jade, se encargará personalmente de ello en su hostal. Los niños, se usarán para experimentar, en venganza de aquel maldito laboratorio del CIRE: no habrá piedad. Y los ancianos eran meros recipientes de donde beber sangre algo añeja, pero sabia. En cuanto a los adultos, no tenían un futuro demasiado claro; según qué casos o qué adultos, serían utilizados para distintas cosas. Pero, precisamente, eso era lo peor: no saber nunca qué era lo que iban a hacer contigo.
Finalmente, con el paso de los años, los vampiros empiezan a relajarse y a corromperse. Los humanos se dan cuenta de aquella situación y empiezan a reagruparse. Es entonces cuando, todos aquellos niños que huyeron años atrás, los niños del exilio, regresan a Laine, para recuperar su tierra, su hogar, sus vidas. Algunos, lo hacen llamados por sus familiares; otros, por voluntad propia.  
Los vampiros se mudan al centro urbano, haciéndolo suyo. Una ola de corrupción y violencia ocupa toda la zona. Entonces nacen los suburbios: los habitantes del centro urbano, huyen hacia el extrarradio, construyendo barracas y algunos edificios de baja calidad para vivir. También aparece ahora el gueto universitario. Los pocos jóvenes en edad de estudiar, son llevados a una especie de gueto, en la zona antiguamente ocupada por los rancheros (Far West). Al menos, estaban mucho más protegidos y, en el supuesto caso de que los humanos pudieran volver a luchar, contaban con inteligencia, además de con la fuerza, ya que habían logrado rehabilitar una pequeña universidad y así estos jóvenes, podrían acabar sus estudios.
Todo esto conlleva a que, de nuevo, los humanos y vampiros convivan juntos, en una batalla diaria para no morir en cualquier esquina. Los vampiros siguen teniendo el control, pero los humanos se están uniendo y están decididos a recuperar lo que fue suyo en un principio. La vida en Laine se convierte en un auténtico infierno, es una pesadilla, donde sólo sobrevive el más fuerte, el más listo y el más duro. Einar, desde luego, será uno de ellos.  
Muchos logran mudarse a la zona social, gracias a la reconstrucción y rehabilitación de ciertos edificios. Otros, pueden vivir en los bosques, alejados de la corrupción de los vampiros y casi, clandestinamente, poder reproducirse, pero con mucho cuidado y temor. Había que tener mucho valor para hacerlo sin protección; realmente, era el mejor modo de acabar con los vampiros: reproducirse hasta la extenuación.
La peor zona, será la industrial. Es deprimente, dejada de la mano de Dios y además, cuenta con el más terrible lugar para trabajar: los Muelles. Allí se trabaja hasta caer muerto, cobrando una miseria, pero es que no había otra cosa. Muchos tuvieron que pasar por allí, hasta encontrar algo mejor, aunque después, eran considerados prácticamente como héroes. Y los suburbios... ¡ah, que zona más cañera! Allí nace la revolución. La encabezan los músicos pues, la música, es el mejor arma para unir a las personas bajo un mismo estandarte: la libertad. Los vampiros son muy conscientes de ello, por lo que, no era de extrañar, que les tuvieran una especial animadversión y fueran sus víctimas preferidas. Dos grupos logran hacerse fuertes en su cometido: los High Priests y los Vamp No More. Aún así, sufrirán varios altibajos y agunos de sus miembros, dejaran sus respectivos grupos, buscando otras alternativas para hacer justicia o por una simple cuestión de cambio.
Todos los personajes van a vivir experiencias únicas, ya sean maravillosas o terribles, pero del todo inolvidables. Si acaso deseáis conocerlas, ahora mismo paso a mostrároslas.